Vamos a tratar varios temas cortos (ejem, ejem) que han ido saliendo por
ahí en base a un post corto (ejem, ejem) cada día. Hoy hablaré sobre mi
Maestro, mañana sobre los furryes (qué es eso? La respuesta mañana), pasao
sobre el mindfucking (qué es eso? La respuesta pasao) y al otro sobre algunas
cuestiones de actualidad como el libro ese de “cásate y sé sumisa”. A que mola?
Pues vayamos al turrón.
En realidad hablar sobre mi Maestro debería ser un post de la serie QUÉ FUE
DE…? si no fuera porque sí que se qué es de él, que aunque menos sigo
manteniendo contacto.

Antes de entrar en harina y contar intimidades escabrosas del uno y del
otro hay que decir algo; en esta vida es importante tener referentes.
Todos tenemos referentes. Alguien que nos inspira y nos muestra el camino a
seguir. Primero les imitamos y luego poco a poco vamos encontrando nuestra
propia voz. Pasa en las Artes (el discípulo que copia al maestro), pasa en la
vida (el hijo que admira al padre), pasa en todos los aspectos sociales (yo quiero
ser como x/ hacer lo que hace x/ etc…) y pasa…en el bdsm.

Yo en el bdsm no tenía referentes porque era joven, nuevo, inocente…y
porque no los había.
Si quieres dibujar, coges como referente al citado Will Eisnear, que es un señor
dibujante. Si quieres hacer cine, coges como referente a Jonh Ford. Si quieres
ser buena persona, coges como referente a tu sufrida madre. Si quieres ser una
adolescente rebelde, adicta y promiscua, coges como referente a Mailey Cyrus.
Pero si quieres tener un referente en el bdsm…¿qué cogías a mediados de los
90? ¿Los anuncios de profesionales de la revista TACONES ALTOS? ¿A Dómina Zara,
que aunque no es mal referente no se tenía una imagen de ella más allá del
personaje?

Así que yo cogí por mi propia cuenta como referente a mis pajas, mis
fantasías, mi modo de ver la vida y con eso me iba apañando. Pero me faltaba
algo…algo que encauzase todo este batiburrillo de pensamientos e inquietudes.
Nunca he tenido claro si nosotros escogemos a los referentes o estos nos
escogen a nosotros.
Cuenta la leyenda que Leonard Cohen era un tipo huraño que vivía en una
cabaña sin más compañía que una radio. Un día, oyó en ella a Bod Dylan cantar y
se dijo “esto puedo hacerlo yo”. ¿Fue el Destino que quiso que Leonard Cohen
escuchara a Bob Dylan y le impactase hasta el punto de dejar su cabaña y
ponerse a escribir canciones? ¿Fue el propio Leonard Cohen que estaba predispuesto
a hacerlo y vio en Bob Dylan un impulso para ello? ¿Hubiera sido la misma
historia de haber puesto radio Olé!?
Ah, nunca lo sabremos…pero estoy divagando y aquí el protagonista es mi
Maestro, no genios locos que no saben cantar.
Cuando conocí a mi Maestro tenía el Nick de Dejud, aunque su nombre de
sumiso más habitual es Helio. Helio de Jude, cabe añadir. Y aquí hago un inciso
para decir que voy a hablar de él pero que en justicia debería de hablar de LOS
MAESTROS, pues ambos forman una pareja espectacular. Luego añado algo sobre
ella.
Conocí a Dejud/Helio en el extinto chat ozú, del que ya he hablado alguna
vez. El chat ozú, para quien no lo conociera en su época, era un poco donde nos
reuníamos los mataos que no acabábamos de encajar en el irc-hispano, el otro
gran chat de estos mundos. Digamos que éramos algo menos serios, más sencillos,
menos cerrados y más distendidos.
Yo ya había hecho mis pinitos e incluso tenía Ama, la gran LadyFeet (por
entonces Guest69) a la que envío un saludo. Pero a fuerza de entrar cada día
iba creando mi pequeño grupo de afines y entre ellos…pues había un tal Dejud
que era un cachondo.
¿Qué una tipa entraba diciendo barbaridades sobre “los sumisos deben ser
tal o cual”?, pues el tal Dejud me enviaba un privado diciendo “esta tipa,
aparte de no tener ni idea de bdsm, ni siquiera está buena”. Y le tomaba el
pelo en su puta cara y la tipa no se daba ni cuenta. Así, con clase.
Entre tontería y tontería, pues desgranaba algunas frases o pensamientos
que lograban encauzar en pocas palabras lo que yo aún tenía algo difuso. Lo
importante es disfrutar, decía/ dice él.
¿Os acordáis de todas las perlas de sabiduría que vierto yo aquí de tanto
en tanto en forma de frases recurrentes? Aquello del mundo exterior y el mundo
interior (en sesión estamos en nuestro mundo interior, y no debe entrar el
mundo exterior). Aquello de que lo que las dos partes quieren, entra dentro del
juego. Lo que una parte no le gusta, pero LO TOLERA, también. Lo que al menos a
una de las partes le repugna, no puede con ello, NO ENTRA. Aquello de que entre
la fantasía y la utopía se antepone la realidad. Aquello de aquí nadie va a
hacer nada que no quiera. Pero sería una lástima no hacer algo que se quiere.
Aquello de…en fin, todas esas cosas que repetimos por aquí. Son frases suyas
que he copiado vilmente.
Entre una cosa y otra fuimos haciendo cierta afinidad y, como proceso
natural, nos fuimos escribiendo correos que, dado mi estilo y que él no se
queda corto, parecían las cartas de San Pablo a los Corintios.
Luego vino a Barcelona con su pareja-Ama y nos conocimos en persona y la
afinidad de las letras se hizo carne.
Aquí es donde he de frenarme un poco y no contar intimidades en demasía. No
porque él y yo nos hayamos chupado la polla o algo similar, que en todo caso
eso sí que se podría decir, si no porque la importancia de LOS MAESTROS en mi
vida se incrementa con ese encuentro…al que acudió también un ser rubio de nada
ligero acento andaluz cuyo Nick empieza por Z. Por aquel entonces, había
empezado una relación con ella y estaba todo por descubrir.
Yo con ella descubrí la entrega una noche de verano en que sí que era muy
hermoso querer y sentir. Y ellos estaban allí para verlo.

Seguimos en contacto con los Maestros e incluso fuimos a verlos a la villa.
Fueron testigos de muchas cosas maravillosas entre Z y yo y de alguna que otra
no tan agradable. Nunca juzgaron y siempre nos mostraron su apoyo a ambos. Nos
vimos en persona más veces y la vida siguió su curso. Poco a poco se dejó de
entrar en el chat y otras generaciones tomaron nuestro relevo en él, menos
algún irreductible como AMO BITELCHÚS. Poco a poco los e-mails y las llamadas
eran cada vez menos frecuentes, pero si ellos pasaban por Barcelona o nosotros
por la villa era una visita obligada. Siempre estaban ahí, y lo sabíamos.
Me tengo que frenar un poco para no contar cosas que no me corresponden
contar a mí. Pero la importancia de Dejud en el bdsm no se limita al chat o a
la esfera de mi vida. Lo que pasa es yo no soy quien para decir que Clark Kent es Superman (o viceversa, nunca lo he tenido claro). Y los entendidos sabrán entender lo que yo entiendo.

En todo caso, es de justicia hablar también un poco de Jude. Suya es la
mejor definición de Ama que he oído jamás; “porque me pone apretarle los huevos
a un tío”. Sé que ambos se adoran y son la prueba viviente que el bdsm no sólo
no está reñido con el amor sino que lo complementa. Y me gustaría decir más,
pero de nuevo digo que no me corresponde a mí hacerlo.
La cosa es que si alguna vez dudaba de que somos personas antes que roles y
que lo que importa son las personas y no la fantasía, y que ambas cosas no son
incompatibles…(algo en lo que se duda cuando eres joven y lees ciertos escritos
de cenutrias tipo Elisenda y su Robin-Ana) pues…pues vino un abuelete al que
conocí en un chat diciendo paridas a demostrarme lo que en verdad importa.
La última vez que los ví fue el año pasado, cuando fui a Madrid en apenas
dos días por compromisos familiares. Como pasa con la gente que quieres de
verdad, fue como si nos hubiésemos visto el día anterior. Los vi estupendos,
como siempre, maquinando cosas, como siempre, algo apartados del mundanal
ruido, como desde hace algunos años, con sus cosas, como todo el mundo…siendo
los referentes y los amigos que siempre serán.
Hace tiempo que no hablo con ellos, pero les voy a llamar para que lean
este escrito, faltaría más. Como lo van a hacer, porque además los voy a
acojonar vivos diciéndoles que cuento intimidades mil, sólo les diré lo que ya
saben; GRACIAS POR TODO. Dudo que sepan en verdad la importancia que han tenido
(y tienen) en mi vida. Dudo que sepan en verdad lo que les quiero y les admiro.
No sé si siempre se lo he demostrado. Pero me gusta pensar que siempre lo han
sabido y lo saben.
Permitidme en estas últimas líneas pegarme el moco. Una de las cosas más
gratas que me ha dado el tener este blog es que de tanto en tanto hay gente que
se pone en contacto conmigo en privado y me da las gracias por este espacio. Lo
hace de corazón, porque le ha aportado una visión que necesitaba, o le ha
saciado una inquietud que no sabía bien cómo canalizar.
Puede que alguna gente vea en mí lo que yo en su momento yo ví en mi
Maestro. Lo cual me hincha el ego y me es muy grato, desde luego. Pero en uno
de esos raros ataques de humildad que me dan muy de poco en poco lo diré alto y
claro; ni de coña le llego a la suela de los zapatos. Yo soy un fraude, sólo
repito lo que me ha enseñado y lo que en cierta forma me ha propiciado vivir.
Ojalá ellos se hicieran más visibles, os íbais a enterar lo que mola de verdad.
Me pone el corrector de Word 4 páginas e iba a ser un post corto. Así que
para que de tiempo a leerlo lo dejaré en berbecho el fin de semana y el lunes
abordaremos los otros temas. Podía corregir el encabezamiento, pero es que se
pierde la gracia…
Hasta el lunes. Y ya saben; muchos Infiernos empezaron por un beso. Y en la
mayoría valió la pena.
Pd: Indoc anda liado con temas escabrosos que incluyen órdenes de busca y
captura, mafia rusa y tías en bolas, pero me asegura que en breve retomará los
dibujitos. Eso me pasa por dejarle salir del cuarto de las escobas con la excusa
de la hora de sol semanal por no se qué convención de los derechos humanos y
tal…si es que de tan bueno soy tonto.