viernes, 18 de febrero de 2011

ALGUNAS DIFERENCIAS (DE FORMA) ENTRE LOS VAINILLAS Y EL SELECTO GRUPO DE LOS BEDESEMENIEROS

Los practicantes del bdsm nos creemos lo más y que lo hemos inventado todo. Pues no. Yo estas separaciones tan radicales entre el mundo bdsm y la sexualidad convencional (o, en argot bdsm, vainilla), no me las acabo de creer, por que sabido es que son más falsas que la falsa moneda aquella que cantaba la Piquer. E iba a hacer unas divagaciones entre que todos somos humanos y tenemos necesidades y tal cuando he visto que el tema me daba para un rollo patatero de los míos y que hoy no tocaba. Así que lo anoto en mi libreta de los temas pendientes, junto con las anotaciones en letra de médico de “hablar de la pureza bdsm, tan valiosa para algunos/ decir que bedesemenieros y vainillas no somos clanes rivales como son los góticos del Averno Norte y los del Sur/ que cualquier vainilla puede probar estas fantasías y cualquier bedesemeniero tiene ganas de palpar, besar y hacer el amor o follar como animales, igual que cualquier hijo de vecino/ que hay un momento para cada cosa y cada cosa para su momento”, y alguna anotación más que ni yo mismo he entendido y ala, tocho para otro día diciendo esto mismo pero ocupando folios y más folios de pajas mentales.

Lo que sí vamos hoy es a decir que la diferencia fundamental está, claro, en las formas.Y como ejercicio de distensión vamos a, con buen humor, exponer algunas. Me centraré sobre todo en la vertiente bedesemeniero sumiso, que son los roles y el sexo que sufro, pero abierto dejo la veda para que otros sexos y roles expongan las que consideren.

Con la venía;

BEDESEMENIERO: Miramos al Ama directamente a las botas de cuero negras, altas y con tacón imposible.
VAINILLA: Mira a la mujer directamente a...bueno; depende si viene o va.

BEDESEMENIERO: Hacemos las sesiones con utensilios mil, a ser posibles en mazmorras equipadas, con media luz para dar ambiente siniestro, vestidos para la ocasión...
VAINILLA: Aquí te pillo, aquí te mato, que el mundo se acaba...

BEDESEMENIERO: No nos vamos de putas, pagamos tributo. Y nos cobran 200 euros por una sesión de una hora en la que no hay sexo ni peticiones.
VAINILLA: Se van de putas, y por 20 euros la ilegal de turno les hace lo que pidan, que normalmente es una mamada con la que se corren en tres minutos.

BEDESEMENIERO: Como símbolo de pertenencia, llevamos el collar.
VAINILLA: Como símbolo de pertenencia, llevan un anillo.

BEDESEMENIERO: Resiste horas y horas de azotes, pinzas, privaciones, castidad...
VAINILLA: Echan siete sin sacarla.

BEDESEMENIERO: Adoramos a nuestra Ama y hacemos todo lo que nos ordena, sufriendo privaciones y control sobre nuestras vidas.
VAINILLA: ¿De dónde vienes a éstas horas? Y nada de ir el miércoles con tus amigotes a ver el fútbol, y ya me estás arreglando ese grifo que gotea y ve ahora mismo a tirar la basura, y para cenar esta noche acelgas, que estás muy gordo, y no me dejes la mesa perdida de migas de pan, y recuerda que mañana nos toca ver a mi madre y...

BEDESEMENIERO: Humillaciones varias.
VAINILLA: Trabajo.

BEDESEMENIERO: Privación sensorial.
VAINILLA: La mujer se pone debajo y mientras folla piensa “hay que pintar el techo”.

BEDESEMENIERO: Estamos obsesionados con la seguridad.
VAINILLA: Están obsesionados con que no se rompa el condón o con no pillar ladillas.

BEDESEMENIERO: Azotes varios.
VAINILLA: Arañazos en la espalda.

BEDESEMENIERO:Nos encanta hacer sexo oral.
VAINILLA: Les encanta el sexo oral...sobre todo que se lo hagan.

BEDESEMENIERO:Nos sodomizan como perras.
VAINILLA:Les das vergüenza pedirles a la pareja que le metan el dedo en el culo por que les gusta.

Pues eso es todo por hoy. Recuerden que el MIERCOLES tienen la bedesemenida de rigor, y si sale alguna tontería más hasta entonces pues también se pondrá. Sean buenos o malos en su justa medida y recuerden...tengan cuidado ahí fuera.

10 comentarios:

treinta dijo...

un post agudo.

Cliente X dijo...

O_O

No dejas de sorpenderme, ¿nos llamáis vainillas? Jajjjaj. "CUERUDOS", ñañañaññña.

Lo que me alegro de que mis "sesiones" me salgan por 20 pavos... pq si fuesen de 200 iba a pasar más privaciones y castidad que el bedesemeniero más sumiso. Por lo demás sí que nos parecemos mucho.

Un abrazo, quizá un día pruebe las delicias del bdsm. Qué bello es cumplir los deseos de una hermosa mujer...

Spirit dijo...

Saludos a todos;

treinta; gracias! viniendo de quien viene el halago, sé que no es gratuito...

Un abrazo

cliente x; pues si, en el argot bdsm se utiliza el término vainilla para definir la sexualidad convencional. Parece ser que viene de que el vainilla es un sabor "stándar" y el bdsm algo más rebuscado...o algo así. Y bueno, yo he puesto 20 euros el servicio de prostitución stándar y callejera, que creo que por ahí va según lo leído y escuchado, pero ahí eres tú quien me podría corregir o no...

Y si, las sesiones de sado oscilan entre los 80 euros la hora a los 300, depende de la equipación, el "nombre" de la dómina, etc...Un timo, se mire como se mire, sobre el que ya he escrito otras veces. No sólo por que por ese precio tienes entre 8 a 30 mamadas, si no por otros factores ya expuestos. Y que conste que yo me apeé de ello no por dinero, si no por la búsqueda (y el encuentro) de la "autenticidad".Por cierto; la semana que viene tengo pensado divagar sobre si afecta la crisis al bdsm...

Un abrazo

lavacamejor dijo...

Buaaaa!!! se me ha borrado un tocho genial q había escrito!!! Habia sexo, malas ideas, fino sarcasmo y conciencia social MIERDA MIERDA MIERDA

Spirit dijo...

lavacamejor; pues lástima cruel, que a mí eso me ha pasado alguna que otra vez y me he cagado en Bill Gates cosa mala. Esperamos que un día con paciencia y buen humor lo reconstruyas (dándole al guardar del word cada diez segundos), más que nada por que el cóctel promete...sobre todo si había sexo.

Un besazo

dijo...

¿Vainilla? Qué fuerte. No sabía eso jejeje.

Anónimo dijo...

Hablando en primera persona como lo haces, hay bastantes puntos para discutir contigo, que una cosa es decir y otra cosa lo que se hace.

:-)

Spirit dijo...

Saludos a todos;

(carácter que no he sabido encontrar;) pues lamento llamarte de esa forma, pero s cierto que no he sabido ver el carácter con el que tienes el nick. En todo caso, bienvenido por estos lares, esta es tu casa para lo que quieras.

Un abrazo

Anónimo/a; pues he de reconocer que me cuesta interpretar su comentario, (aunque siempre hay cosas para discutir, eso es lo bueno de este espacio), y sobre la primera persona...bueno, yo soy bedesemeniero, vainilla y lo que se tercie, que nunca me ha importando mezclar sabores.Y...bueno, digo y hago tantas cosas que en alguna acertaré, no?

Un abrazo

Cliente X dijo...

Creía que lo de vainilla era más bien por lo "suave" de nuestras aficciones.

Tengo una pregunta, ¿no te ha pasado que una sesión sado desemboque en una cópula vainilla? Es decir que la tía te ponga tanto que digas a tomar por el culo, melafo.

Spirit dijo...

cliente x; pues en respuesta a tu pregunta, te diré que así tal y como la expresas parece que la decisión sea mía, y yo sólo soy un pobre sumisito...

Hombre, pasar ha pasado de todo. Normalmente se puede resumir en la frase de "sabemos a lo que vamos", que para tener sexo convencional no hace falta tanta parafernalia. Y lo que se busca es bdsm. Otra cosa es que...pues no se, que la parte bdsm se haya planteado inicialmente más como un condimento, un juego previo, un experimento para ir provando, etc...en vez de como una sesión propiamente dicha. O que la otra persona simplemente quiera ir probando y coger poco a poco experiencia y soltura. O que la sesión evolucione y, dentro de las formas, o sin ellas, se haya acabado en sexo convencional, pero no tanto por el "a tomar por culo" si no porque el contexto así lo requería.

Así pues, en respuesta a tu pregunta, pues ha habido sesiones de horas en las que ni me he corrido, sesiones en las que he acabado corriéndome mediante sexo manual, por mano propia o ajena, y sesiones en las que el bdsm era más un atrezzo con el que ir jugando que otra cosa. Lo importante, como siempre, es adaptarse a la persona y a la situación, sin perder nunca el verdadero objetivo; disfrutar en libertad de las posibilidades infinitas de estos juegos.

Un abrazo