Hoy voy a vengar un agravio cometido hace 30 años. Sí, me lo he tomado con calma. Es que si vente a tomar unas birras por aquí, si hoy toca sesión por allá, que si sale el último de Batman por acullá...y claro, te van liando, te van liando, y la casa sin barrer. Pero de hoy no pasa. Parafraseando a LA PRINCESA PROMETIDA; Dra Ochoa, soy spirit de Lady Monique. Tú jodistes mi vida, prepárate a morir. Bueno; Dra. Ochoa, soy yo, tengo un blog muy chulo. Tu me hicistes pasar un mal rato en mi adolescencia, prepárate a recibir alguna collejilla en este escrito. Que tampoco hay que tomarse las cosas tan en serio.
Antes del texto, situemos el contexto;
Año de nuestro Señor 1990. No es que no existiera Netflix, HBO o Canal Cocina plus. Es que...no existía internet! Y no es que no existiera internet, es que...no existían ni las teles privadas! Solo había dos cadenas y algunas autonómicas. Para la mayoría de vosotros este panorama es equiparable a la Edad Media. Yo tampoco sé cómo pude sobrevivir ante tanta barbarie.
En esto que los responsables de RTVE deciden hacer un programa sobre sexo en prime time. Ahora nos reimos, pero por aquellas calendas era una apuesta arriesgada; apenas hacía 16 años que había muerto Paco y ya sabemos que el régimen Nacional Católico y estas cosas del follar no se llevan muy bien.
Eso sí, un programa divulgativo, científico, serio. Aquí nada de coños ni pollas ni gente follando; todo muy académico, muy de buen gusto. Dibujos en plan mapa de ese laberinto que es el coñ...el aparato genital femenino. Eminentes psiquiatras gafapastas como invitados. Médicos forenses, tono neutro. La lección de anatomía utilizando el mapa del hombre del tiempo. La Señorita Rottenmeyer con su pizarra con público de fondo.
En la dirección, un histórico de RTVE, Narciso Ibáñez Serrador. Sí, el del 1.2.3, las historias de terror y otras chorradas. En la presentacíón, una psiquiatra con un montón de másteres realizados en niu york; Elena Ochoa.
Vamos a deternernos un poco en este personaje.
Leo por ahí que dudó si aceptar o no la presentación del programa por el que dirán, que si sus padres tendrían vergüenza, que le costaba decir la palabra "pene" y ensayaba ante el espejo, que si no se sentían cómoda, que si estuvo a punto de dar varias espantadas y dejar el programa colgado. Con este panorama, no dudo que le saldrían los títulos por las orejas, pero ya transmitía que era más de la teoritas que de la praxis. Que no aprendió de sexo follando en los lavabos de los bares, precisamente.
Era lo que buscaban. Alguien más bien rígido. Que si hubieran puesto al frente al Arturo Pérez Reverte de los 90 o a alguien de la movida como Paloma Chamorro nos echaríamos unas risas que todavía durarían, pero aquí no se trata de eso, que somos gente seria. Con que sea buena comunicadora, quede bien ante cámara y de la impresión de que controla el cotarro, basta.
Y bueno, patín, patán, patún, empieza el programa. Como por aquel entonces cualquier mierda que echaran en las únicas dos cadenas tenía unos espectadores de la hostia, en su momento fue un fenómeno. Imagino a los españolitos, cuya educación sexual se la había proporcionado Alfredo Landa persiguiendo suecas en Benidorm, alucinados. ¡Una tía hablando de sexo en la tele! Más de uno imagino tendría a mano la caja de clínex y la tuvo que dejar de lado al ver una cosa con muchos colorines que decían que era un clítoris o algo así.
-Ese es el agravio, pedazo guarro? Que no te pudistes masturbar a gusto porque imaginabas una peli porno y salía un tipo con barba fumando en pipa diciendo palabras esdrújulas? -Noooo....ahora llega.
En total se emitieron 40 programas durante el año 90. Uno de ellos, hablaba....tachán tachán....SOBRE EL SADO MASOQUISMO!
Lo recuerdo como si fuera ayer. Yo un chaval de 16 primaveras con estos impulsos raros. Cogí mi cinta de VHS para grabar el programa. Esperaba, claro, alguna escenilla, que además era la época de la polla a 120 grados a cada minuto y no había material sobre eso apenas. Tenía que tomar pastillas para desentrepar, no como ahora, mecachis. Punto malo; mis padres también estaban, viendo la tele y cenando y haciendo lo que hacían las familias españolas a esa hora, no como en estos tiempos, que cada uno está con su móvil o tablet a su bola. Vaya puta mierda la adolescencia.
-¿Por qué lo gravas?- Dijo mi padre, que creo que sabía de que palo iba su hijo....
-Er....no lo estoy gravando....
-Pues el botón está en rojo y pone REC. Delante de mis narices, además.
-Ah, sí! Er....para un trabajo de clase.
-Ya....
Mis padres eran los típicos españolitos de clase obrera que se debatían entre su educación nacional católica y haber sido adultos durante la transición. O sea; mojigatos y permisivos a partes iguales. Supongo que pondrían los ojos en blanco pensando algo así como "después de 16 años le hemos cogido cariño, pero nos ha salido tonto un rato largo...." y miraron para otro lado. Pero esa historia ahora no toca. Superado el primer obstáculo, quedaba el siguiente; ver el programa sin tocármela. Y no pudo empezar mejor:
ATENCIÓN, ATENCIÓN,-Dijo la Dra. Ochoa sin despeinarse el moño que sería marca de la casa: -VAMOS A EMITIR UNAS IMÁGENES MUY FUERTES SACADAS DE UN CLUB PRIVADO DE AMSTERDAM PARA QUE SEPAN DE QUÉ ESTAMOS HABLADO.
Dolor de huevos.
Voy a contarlo tal y como lo recuerdo. Como ha pasado el tiempo, puede que el recuerdo esté algo distorsionado, pero lo dejaremos así porque si no no tendría gracia. Luego vuelvo sobre ello. Iba a ver un vídeo de Amas dando azotes a sumisos! Ahora tenemos tropecientos trillones en internet, pero por aquel entonces eso no existía. De los dibujos y las fotos cutres al movimiento. De la fantasía a lo real. Existe.
Lo que recuerdo es un vídeo oscuro y cutre donde apenas se visualizaba nada. Se oían ruidos de fondo que se suponía que eran gritos y zas zas y apenas de vislumbraba una tipa o varias con un látigo. Algo de jaulas, paredes rojo burdel y poca cosa más. Sí, esto era lo fuerte. Ya hemos dicho; programa elegante, sin escándalos, sin ruido. Que ya la liamos cuando el programa anterior utilizamos un plátano para enseñar a poner un condón, ahora lo más quietecitos posible. Hacemos lo que podemos, que diría Luis Vigil varios años después.
Bueno, puedo resistir que un vídeo me defraude. He cogido tantas pelis porno en el vídeo club donde lo sado maso eran las botas que llevaba la rubia de turno al follar que lo puedo soportar.(Sí, un menor de edad podía coger pelis porno en el vídeo club a la mínima que tuviera tres pelos en el bigote, ya hablaremos de eso otro día).
Pero lo peor vino después.
En el debate posterior, alegrías y risas sin fin. Esta gente son unos putos enfermos. Hay que estar muy mal del tarro para disfrutar recibiendo latigazos. Pueden que incluso sean peligrosos, avisad a la policía si su vecino es alguien así. No, no, pobrecillos, déjalos, tienen un trauma que podemos tratar con pastillas, psicoanálisis y castración química. Yo ahí, grabando con mi VHS cutre y recibiendo la del pulpo sin saber de dónde me venían las hostias. Y sin paja, que era lo peor.
Como he dicho, puede que mi recuerdo esté distorsionado por el paso del tiempo. Pero esta parte seguro que no. Uno de los psiquiatras/forenses/eminencias/hechiceros de la tribu de experto consultor contertulio decía que eran fantasías....e incluso hablaba de consenso! Y la Dra. Ochoa le aplicaba el tercer grado. Pero de qué estás hablando, moreno, hay que estar mal de la cabeza para hacer algo así. Esto es producto de un trauma, que te lo digo yo que tengo un montón de másteres de niu york. Que no necesariamente, doctora. Que si, joder. Que a esta gente le pegaban palizas de pequeños y se han quedado traumatizados. No disocian el subcosnciente de su puta madre.
Y yo miraba de reojo a mi madre, recordando las veces que me ha tirado la zapatilla por el pasillo por alguna Jaimitada (normalmente por bocazas), y no, no recuerdo tener ningún impulso sexual por ello ni ningún trauma al respecto. Pero la Dra. don erre que erre; que no es normal, que vaya putos enfermos, que se lobotomicen, que no han superado la muerte de sus padres, como Batman. Y el otro la replicaba; que no, tía, que no pasa nada, que sí que pasa, que esto ser mal. Y así todo el rato hasta que la doctora concluyó por sus ovarios que todos los que teníamos estas taras éramos enfermos que sufríamos palizas de pequeños y a correr. Pasemos a otro tema. Y punto.
Con 16 años no tienes la personalidad marcada. Normalmente, lo que tienes es una empanada mental en la cabeza y toda la vida por delante para desempanarla. Pero pese a que todavía no había desarrollado mi encantadora personalidad, lo tuve claro; yo no soy ningún tarado. No tengo ningún trauma. Me gustan estas fantasías, no son malas, y algún día me darán la plenitud y seré aceptado por ello. Me faltaban los olivos de fondo, como en LO QUE EL VIENTO SE LLEVÓ, para jurarlo. Pero Vive Dios que esto no iba a quedar así.
En realidad, quizás este mal rato fue el germen de este blog. Al crearlo, tuve claro el motivo; que nadie esté solo, que estas fantasías son normales, que no pasa nada, que no estamos más tarados que el resto de la gente. Que hay que revertir este pensamiento como sea.
El tiempo me ha dado la razón. Spirit 1, Dra Ochoa 0. La psiquiatría considera a día de hoy estas fantasías como una parafilia, algo bueno siempre que no sea obsesivo, el Sr. Grey ha entrado en los hogares de trillones de almas, venden fustas en los chinos y este blog lleva 13 años de éxito sin igual. A día de hoy sería impensable un programa así. Y no hablo ya de que consoladores, hitachis, etc....forman parte del ajuar.
En realidad, recuerdo todo con tristeza. Eran otros tiempos, es cierto. Aún queda mucho por hacer, pero avanzados una barbaridad. Tampoco niego los méritos al programa; se habló de la homosexualidad con normalidad (putos maricones, siempre yendo delante de nosotros), se dijo que el sexo no sólo era procreación, sino placer, se habló para prevenir las ETS y se explicó cosas desconocidas como que los clítoris existen. El mejor escriba tiene un borrón. Pero vaya puta mierda en su momento, la verdad. Claro, que luego vendría Pepe Navarro presentando Amas que castran a sus sumisos para echarse unas risas y ya la acabaríamos de liar. Pero eso es otra historia.
Como toda venganza, me ha sido un poco triste, pero bueno, me tenía que sacar la espina. Por contarlo un poco todo, la Dra Ochoa se casó con el afamado arquitecto Norman Foster y anda por ahí siendo merchante de arte, renegando de su etapa como presentadora. Los programas de sexo están a día de hoy en youtube. En fin; como he dicho, otros tiempos.
Por contarlo un poco todo, he visto que esos 40 programas están en esa joya que es TVE a la carta. Podría buscar el que comento y revisionarlo. He preferido no hacerlo; escribo a flor de piel con mi recuerdo de adolescencia. No sé si es lo que pasó, pero es lo que sentí. Pero ya me he vengado al vivir cosas que pocos mortales han vivido.
Dra. Ochoa, te perdono.
Tengan cuidado ahí fuera.
Spirit de Lady Monique de Nemours.
1 comentario:
Podrías haberlo escrito en mayúsculas pero no más claro.
Chapeau
_NeFeR_
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