domingo, 20 de marzo de 2022

50 TUITS DE SPIRIT, BUENO, 25 AGAIN

Bueno, pues anda esto un poco parado, no? Claro...los follones de twitter no me dan tiempo para más! Y, la verdad, que entre una cosa y otra y la tercera guerra mundial y tal pues no tengo tiempo para esos tochos de sabiduría infinita marca de la casa. Pero es que ayer me llamaron...gurú del bdsm! Con ironía y en un contexto de insulto, pero bueno, gurú del bdsm al fin y al cabo. Y, por supuesto, alguien que obstenta tal título no puede defraudar a sus múltiples fans. 

Así que como sospecho que a la cuenta de twitter le quedan dos telediarios por temas varios que igual desarrollamos en breve (entre ellas cierres de cuentas de colegas mucho más discretos, educados y de bien que yo), pues...¿qué hacemos cuando vamos justos de tiempo? Reciclar tuits! Así que vamos a ello, en otro volumen de sabiduría infinita en forma de micro píldoras antes de que se pierdan para siempre, como lágrimas en la lluvia. Si no he contado mal, 25.



Ilustran invitadas especiales de la serie "esto es una Diosa y lo demás tontería".

Estoy leyendo varios tuits sobre un tuitero que liga bastante y tal. Os haré un spoiler; no soy yo.

Aunque me fastidie decirlo, he de reconocer que en esta etapa de mi vida, donde me la suda la polla todo, soy más feliz que cuando sentí y quise.

El bdsm es la "recreacion" de una fantasía. Eso implica un escenario, un esfuerzo, un creer y sentir, un hacer, una predisposición. En ese sentido, sí me parece una sexualidad y sensualidad más evolucionada. Cualquier primate siente deseos de follar.

Para estar vivo no necesito el bdsm. Pero el bdsm me hace sentirme vivo.

El bdsm tiene todavía un barniz transgresor, contracultural y perverso que espero no pierda nunca.

Creo que el bdsm se ha de sentir mirada con mirada, dolor en el cuerpo, piel sobre cuero/ látex, sintiendo el aliento y el sudor. Me parecen perfectas las relaciones cíber; cada uno lo vive como quiere o puede. Pero yo en esto no se si soy un anacronismo o la resistencia.

Aunque me encanta socializar, no soy partidario del  bdsm "en grupo",tipo eventos fendom o similar. Con todos mis respetos a quienes sí, of course. 1, considero que el bdsm requiere cierta intimidad.2, al menos en las que he ido se fomenta cierta competitividad que me resulta absurda



Era imposible, y sucedió.

Lo que más me molesta de este fin del mundo es lo absurdo y mediocre  que es.

Yo no sé lo que es un sumiso "de verdad" ni aspiro a serlo. Soy un matao que tiene y necesita estas inquietudes/ fantasías desde siempre. Que las necesita para ser, sentir, estar completo. Y las llena como puede, en términos de reciprocidad, sin engaños y con honestidad.

Si alguna vez vuelvo a ser Amo y tengo una sumisa, le ordenaré vestir en cada encuentro con un coldsplay diferente; ahora vístete de Madrastra de Blancanieves, ahora de villana de Batman...

En términos bdsm, soy Dueño de mi propia libertad. Puedo escribir lo que quiera sin comprometer a nadie. Puedo conocer gente sin restricciones, buscando besos y sentires. Pero soy consciente de que tiene un precio. Me pierdo otras cosas de valor. No se puede tener todo.

Toda sesión bdsm no son más que fragmentos de una gran confesión.

Quedo en un bar de chinos en la primera cita. Pero como soy un tío con clase en uno que ponen cacaos entre cerveza y cerveza.ç

He disfrutado más de la vida leyendo libros que saliendo de fiesta.

Gente que descubrió el bdsm una tarde porque podían cobrar más diciendo que yo, que sentí y me han condicionado estos impulsos toda mi puta vida, no soy verdadero. El musical.

No entiendo esta manía de contar las aventuras amorosas. Todo el mundo sabe que sesiono con Scarlet Johanson y yo como una tumba, sin decirlo ni nada...

Si a un héroe se le reconoce por sus enemigos, he de reconocer que tengo mucho que mejorar

Tendremos que centrar los esfuerzos en aquello que nos pueda dar resultados. Pragmatismo, esa es la consigna. Tendremos que centrar los esfuerzos en aquello que nos pueda dar resultados. Pragmatismo, esa es la consigna.

Me han regalado una camisa de Massimo Dutti y ahora vivo con miedo a que se piensen que tengo dinero y sesionen conmigo por ello y no por mi físico y simpatía natural.



El bdsm pueden ser prácticas de dolor. Puede ser entrega y pertenencia. Puede ser inmovilización, privación. Puede ser misticismo. Puede ser servilismo. Pueden ser cerdadas bizarras con fluidos. Puede ser todo eso, y más, y nada. Puede ser control y libertad.

Voy a cambiar mi nick al de "sumiso funcionario, ejecutivo y banquero", a ver si así me como una rosca.

Cuando he tenido collar, o una relación bdsm estable, siempre he sido fiel. La pertenencia es única. Ahora, que soy sumiso "free lance", sigo siendo fiel a las personas con las que sesiono. Puede que no haya exclusividad ni pertenencia, pero mi fidelidad es a muerte

Soy gordo, tengo un sudor fuerte, me gustan los tebeos desde antes de que estuvieran de moda y visto de mercadillo pese a ser rico. En una sociedad donde prima lo físico y las apariencias, siempre fui y soy un rebelde que paga sus impuestos.

Diosas findom de "págame los porros, perdedor", preguntando si hay sumisos fieles. Iba a hacer un chascarrillo, pero me veo incapaz de superarlo. En vez de eso, lanzo una reflexion; es cierto que hay mucho tarambana. Pero, por regla general, LA FIDELIDAD SE GANA.

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