MIS EXPERIENCIAS COMO AMO; LOS MUNDOS DE GREY EN AUTOBÚS

No pidas a quién pidió ni sirvas a quien sirvió, pues no hay peor vigilante que aquel que siempre fue vigilado.

Hice una encuesta sobre qué temas tratar en el blog. La ganadora fue sobre el bdsm en las redes vs bdsm presencial, cosa ya cumplida. La finalista, a poca distancia y con voto de desempate, mis experiencias como Amo. Supongo que por que se piensa que la materia ya da unas buenas risas de entrada. O por morbo y curiosidad.

Contra todo pronóstico, lo voy a tratar de una forma seria y sentida. Eso no quita el uso de mi prosa salerosa y chascarrillos habituales, pero es posible que sorprenda a más de uno/a.

Le dije al grupo de zarrapastrosos y fracasados del bdsm que iba a tratar este tema. "Seguro que te vas a callar la mitad". Por supuesto; este rosario de cuentas infelices/ calla más de lo que dice/ pero dice la verdad. 

Con la venía;

En realidad alquilé un almacén abandonado que ni los productores de la saga SAW querían del miedo que daba. Compré ganchos y grilletes oxidados a un chatarrero de esos que salen en EQUIPO DE INVESTIGACIÓN. Construí un pozo de unos 3 metros de profundidad. Le llamé EL COVO. Y ala! A captar la las sumisas e ir con mi soplete, cuchillos, hachas, tenazas, máscaras de LA PURGA, etc…llenando las paredes de vísceras y sangre.

Que no, que es broma.

En realidad me hice Amo para que me la chuparan.

Antes de que salgan aquellos que se creen todo lo que leen por internet, vamos a desgranarlo un poco.

LA HISTORIA QUE EMOCIONÓ A SPILBERG.

Ahora está todo prácticamente canalizado en forocoches, pero hubo un tiempo en que había múltiples espacios de foros y sub foros por internet. Yo estaba cómodamente instalado en las comunidades msn, pero cerraron de un día para otro y me tuve que buscar la vida, indagando otros sitios donde dar la chapa como gurú del bdsm y los cómics que ya empezaba a ser.

Supongo que Googleando, entré en un espacio de foros cuyo nombre no recuerdo, y me topé un sub foro cuya nomenclatura he olvidado. Era de bdsm y habían unas 8 personas. Supongo que lo que leí me incentivó, así que me registré y conmigo fuimos 9. Contra todo pronóstico, bien avenidos.

De esos 9, dos eran una sumisa que llamaremos L, y su Señor. Tenían una circunstancias vitales complicadas y una relación a distancia. L era/es de Barcelona. Yo por entonces tenía una relación que iba dando sus últimos coletazos.

Resumiendo; un día que el Señor de L vino a Barcelona quedamos para cenar los 4 y tuvimos buen rollo. Pero, especialmente, tuvimos mucha afinidad L y yo, quizás como sumisos con relaciones complicadas y circunstancias parecidas, quizás por compartir también cierto deje vital e inconsciente.

Era más de coca colas que de cervezas, pero no se puede tener todo. 

Así que no hace falta ser la Bruja Lola para saber lo que viene después. Cuando ambos dejamos nuestras relaciones, lo inevitable dio paso a lo previsible. O al revés. Que puestos a lamer heridas, mejor uno a otro en una cama intercambiando besos. Que nos habíamos echado, de echar, el ojo, pero con la conciencia limpia.

UN POCO DE MORBO

Coincidió todo ello además con que yo tenía ganas de experimentar. En mi descargo, quiero dejar claro que no hubo engaño.

-“Mira, si como sumiso soy nefasto, como D daré directamente pena. Pero unas cachetadas, juegos con pañuelitos y demás cosas en plan lo que dentro de unos años se llamará “kink” sí que me veo capaz de hacer. Si te mola, probamos. Hay un nosequé que no sé yo que me lo pide“

Y probamos.

No fue tan light como pueda parecer. Me salió la bestia. Me dejé llevar. Y he de reconocer que L me lo puso fácil. Le molaba. A ver; que si nos leen los de LA COVA se parten la caja, que AMO BITELCHÚS me miraba por encima del hombro, pero en verdad no me corté un pelo; que me apetecía tirarle del pelo y llamarla de todo, lo hacía, que le daba bofetadas (con esos mínimos de seguridad de no dar en el oído, etc…), lo hacía, que estaba atada a la cama y le soltaba un escupitajo con todos los nutrientes que las glándulas mucosas pueden generar mientras le apretaba las tetas, lo hacía, que le agarraba de la cabeza y aunque mi polla es pequeña le rozaba con la amígdala hasta la arcada, lo hacía, que…

Sí, el flogger era de los chinos, las pinzas de juguete, el atrezzo de mercadillo y la profesionalidad la del hermano de Ayuso, pero creamos esos encuentros de morbo y bizarrismo llevados por la pasión que tuvieron su aquel. Yo he tenido sesiones profesionales más suaves y cutres todavía.

La relación duró unos 7 años, de forma intermitente. Nos veíamos una vez cada mes y medio- dos meses. En términos generales, una hazaña en estos tiempos. De hecho, ni siquiera cortamos; simplemente cada vez era más difícil cuadrar agendas para vernos y al final la vida nos puso otras obligaciones.

Por supuesto, y dado mi forma de sentir el bdsm, desarrollamos una relación afectiva, aunque no romántica en plan estamos enamorados, sino de amantes que se implican e importan, aunque, como cada uno tiene su vida, sin agobiar mucho. No hablamos cada día ni mucho menos, aunque sí nos comunicábamos las cosas importantes. Paralelamente, teníamos también nuestros rollos. Creo que, por su parte, hubo más intensidad de sentimientos, y yo la quise también. Pero esto no es el DIARIO DE NOA ni los mundos de Grey, sino la vida. 

Recuerdo que una vez me dijo que echaba en falta que le diera órdenes en el día a día cotidianas. Durante un tiempo lo probé, y le decía que se bebiera un vaso de agua, cerrase los ojos pensado en mí y chorradas semejantes. Lo típico del manual, no? Los de no llevar bragas al trabajo no, que me parece una guarrada. Pero me la sudaba si lo hacía o no, en verdad lo mandaba porque ella quería que lo hiciera, no sentía ese vínculo de esa forma.

Sigo en contacto con ella, es mi amiga, si bien es verdad no de forma fluída; un whapssat cada tanto tiempo, felicitar la navidad, etc…Ella sigue teniendo su vida y yo la mía.

Luego habrá un apartado de valoraciones y reflexiones sobre todo cuanto antecede, incluyendo mi auto reflexión sobre esta faceta y el por qué la dejé de ejercitar. Pero antes quiero decirle algunas cosas a L;

HOLA, L, QUÉ TAL? (INTERLUDIO)

Aunque estamos en contacto, quiero hacerlo de forma pública. Darte el protagonismo que te mereces en este espacio, aunque sea con este humilde escrito. Tengo muy buenos recuerdos de nuestros ratos, de tu risa. De como lo pasastes mal un tiempo y de cómo siempre salistes hacia delante. De todo lo que compartimos.

Creo que siempre intenté corresponder, pero perdóname si no siempre estuve a la altura. Tu estabas más implicada y a la vez lo tenías más claro, ibas de frágil pero eras la fuerte. Espero que te guste este escrito. Cuenta intimidades escabrosas, pero está hecho desde el cariño y la añoranza. Y la justicia. Siempre te respeté y valoré, pero creo que esto último no te lo supe transmitir como te mereces. Lamento el día que te pagastes una paliza en coche y te dí plantón (por causas de fuerza mayor, pero plantón al fin y al cabo). Lamento muchas cosas, pero de otras muchas estoy contento y orgulloso. Sobre todo de haberte hecho reír y de ver tu cara de entrega. De que seas mi amiga y de haberte conocido. Gracias por todo.

SEGUIMOS.

Como he dicho, con L duró 7 años, que se dice pronto. Pero, aunque limitadas en el tiempo y más ocasionales, ha habido al menos dos personas con las que también he experimentado. Una me autorizó a decirlo, está en twitter, la llamaremos N, y caló a la primera las reflexiones que ahora voy a exponer tras un único pero maravilloso encuentro. Otra la llamaremos S, es una persona con discapacidad y esa historia no corresponde ahora ni aquí. Pero en realidad todo lo expuesto se rige bajo estas reflexiones;

REFLEXIONES GENERALES.

1-Está bien experimentar. Estar bien probar cosas con quien también quiera. Muchas personas han descubierto que le atraían estos mundos, pero tras experimentar han descubierto luego el lado donde más los sienten. Es bueno, porque a veces empezamos por lo que creemos más fácil o nos llama más, pero vamos evolucionando, o sintiendo cosas, o haciendo caso a un “run run” de …”y qué pasaría si…?”

2-En mi caso, el experimento fue muy grato y sentido, pero me reafirmó en mi lado de la fuerza. Como Amo, ví que en verdad lo que quería era complacer a la otra persona. Que daba rienda suelta a mis deseos, pero siempre priorizaba los de la otra parte.

3-Pero, sobre todo, no me creía el papel. No me sentía Amo ni Dueño de nadie. Sí, L lo facilitaba, era yo que sólo me limitaba al rato de nuestros encuentros pero, incluso en ellos, era por mi parte más morbo que Dominación. No era mi naturaleza ni lo que siempre he buscado.

3.1-Recibía su entrega, tan sentida, y en verdad tenía el síndrome del impostor. No soy merecedor de ella. Y ella lo sabe y aún así me la ofrece. Pero no tengo las mismas sensaciones cuando la ato que cuando soy atado. Sentía el poder, pero no sabía qué hacer con él. 

4-Aún así, creo que aprobé si no con nota, si con cierta dignidad. Lo tendría que decir L, pero si duró 7 años fue por algo. En realidad a L le gustaban las mismas bizarradas y actos de violencia insana que a mí, así que era fácil pensar como ella en ese aspecto. Comprendía sus sentimientos y sentires, porque yo también los tenía. 

También era fácil porque conocía el otro lado, y por tanto sus mecanismos y trucos (poner venda en los ojos para que no note la inseguridad, ordena una redacción del primer encuentro, etc..). Ya saben cómo hemos encabezado el escrito; “no sirvas a quien sirvió…”

5-Pero, sobre todo, ví que esto de ser D es muy cansado. Yo me hice sumiso para no trabajar. Vale, tienes un cuerpo desnudo para hacer lo que quieras con él, pero también has de pensar. Es decir; tras un par de sesiones, has de invitar nuevos trucos, nuevas prácticas. Yo sólo hice cosas kink, pero si hubiera pasado a algo más no soy tan inconsciente de manejar un látigo/ agujas/ shibari, etc…sin formarme. ¿Hacer nuditos? Qué horror.

6-Y no digamos ya si hubiera habido D/s. Qué horror. Estar pendiente de todo, ordenar todo, etc…Todo gran poder conlleva una gran responsabilidad, que diría Spiderman. Yo vengo a cobrar a fin de mes por poner el sello, no por firmar. 

Pues estas son mis experiencias. Creo que tengo ya pase para LA COVA, no?

Tengan cuidado ahí fuera.

Spirit.

PD; Si seguimos el orden de la encuesta, el próximo tocho sería sobre por qué cada vez hay menos sesiones presenciales y después una divagación molona sobre el tiempo de ducha en las sesiones pro.