jueves, 26 de octubre de 2023

SALSEOS, SALSEANDO

Desde el inicio de los tiempos, la humanidad ha sufrido guerras, hambrunas, enfermedades y demás. ¿Cómo ha podido soportarlo? ¿Gracias al amor? ¿La cerveza? Pues posiblemente ambas cosas ayudan en gran medida, pero yo creo que en verdad la humanidad se ha sostenido gracias al salseo. Por que el amor es muy bonito y tal, pero te dura un rato. La cerveza cuesta sus reales de Vellón. Pero el salseo es fuente de distracción eterna y casi gratuita.

Por salseo me refiero al cotilleo de toda la vida, el chafarderío, el dime y direte, la especulación gratuita sin casi datos, el entrometimiento, la noticia intrascendente. Estos ingredientes que hacen estas salsas tan especiales.



Ya, yo no…que cada un@ haga con su vida…yo no soy de eso@s...

Mentira!

A todos nos gusta un buen salseo. Entretiene que te cagas y, además, es inevitable si formas parte de un grupo humano. Y ojo! No siempre tiene que ser algo negativo. Pero vamos a desarrollar un poco más el tema y, por supuesto, vamos a aplicarlo a la comunidad bdsm.

Creo que lo he contado alguna vez, yo vengo del chat ozú. Era un chat dónde íbamos los que no acabábamos de encajar en el irc-hispano, canal mazmorra. Al poco me hice con un grupo más o menos de afines que coincidíamos. Hablábamos un poco de todo, incluso de bdsm, y tal. Y bueno, llegó el día inevitable que quedamos un pequeño grupo en persona.



Qué bien, vamos a tener debates bdsm, voy a aprender un montón de grandes maestros que llevan más tiempo que yo. Me van a iluminar con su gran perspectiva e inculcar pensamientos innovadores…

-Hola! ¿Sabes que Amo I. es en verdad un cocainómano? Y no te creas que es verdad que le vaya a poner una marca de fuego en el coño a E, su sumisa, que en verdad ella pasa de él y yo creo que le está tirando los trastos a…

Y, claro, quedé enganchado a estos mundos de por vida. Soy una portera encerrada en el cuerpo de un sumiso. Vale, vine por el deseo, la naturaleza, la necesidad. Y me quedé por el salseo.

Y bueno, al final la comunidad bdsm no es más que el corrillo de la Campos, las sillas a la fresca del pueblo, el radio macuto de la mili. Esto nos puede gustar o no nos puede gustar, pero es una verdad inevitable. Como he dicho, somos un grupo humano con todas sus virtudes y todos sus defectos.

Muchas veces hemos hecho el chiste recurrente de hacer una especie de SALVAME del bdsm. Hay que reconocer que lo tenemos fácil. Y, además, las redes han universalizado y expandido el fenómeno. Lo que antes era local, ahora es universal.



Voy a poner un par de ejemplos de ello. Aquí en Barcelona estamos muy entretenidos con el movimiento de locales de estos últimos tiempos. Sabido es que va a abrir uno nuevo, EL CONVENTO, en breve. Se rumorea que el Rosas5 va a re abrir también en breve, en otra ubicación. Los gerentes de LA ORBITA DEL IO han cambiado. María, del MIAU, también ha delegado la gestión, apenas 5 meses después de transformarlo. El IO ATELIER ha hecho un extraño movimiento con sus homenajes a EL FETISH CAFÉ.

Pensaba que esto nos interesaba a los que nos podíamos mover por aquí, pero me están llegando preguntas y debates de gente de fuera con verdadero interés en qué está pasando. (Spoiler; más allá de lo expuesto ni puta idea). Que cómo el dueño de uno de ellos hace un escrito Destroyer sobre la esencia del bdsm y la sostenibilidad. Que tal, que cuál.

El otro ejemplo es de ayer mismo. Puse que quedo los miércoles con un grupo de amig@s del tema para tomar cervezas. Y de repente, gente que no sólo no ha interactuado conmigo en toda mi vida, sino que ni tan siquiera me sigue, me pregunta dónde quedamos. Sí, claro, a ti te lo voy a decir.

¿Y por qué lo habéis dejado Miss K y tu? Sí, claro, una vez te saludé en 1978 y eso te da derecho a que te cuente mi vida. He visto un bonito e instructivo video en youtube…¿cómo es posible? ¿Qué pasó? Si, claro, voy a contestar a una cuenta desconocida y sospechosa.

Sin embargo, hemos de reconocer que nosotros mismos fomentamos este chafarderío. Las redes no dejan de ser exposición pública. Nosotros mismos exponemos nuestras relaciones, nuestro día a día, etc…Queremos exhibirnos, en cierta forma, y eso nos gusta y no es necesariamente malo. Luego, claro, tiene un precio.



Este precio nunca debe ser traspasar los límites. No se debe exponer más allá de lo que la persona quiere hacerlo. Datos privados e íntimos de quien sea son un límite.

Luego entramos un poquito en el lado turbio del chafarderío. Pero vamos a divagar un poquito más en él. Voy a enumerar someramente algunos que son universales.

Que si tal Ama que ha entrado nueva es un Manolo pajillero o la enésima reencarnación de Almudómina. Que por qué fulanito ha dejado de escribir. Que tal pareja ha roto y hay que interpretar los mensajes de alguno de ellos como el oráculo de Delfos para saber el motivo. Que nadie ha visto nunca en persona a Menganita. Yo reconozco que he perdido la cuenta de las personas que han muerto y luego gozan de buena salud. Que tal es un time loser, que cual se ofrece a todas, normalmente a la vez. Que fulanita va de Ama Divina de la Muerte pero luego hace sesiones en un descampado. Que de dónde ha salido esta chiquita que habla de sado masoquismo extremo en almacenas abandonados.

Sin embargo, mis favoritos son las “findoms wars”, aunque el término exacto deba ser “finfet wars”. Ya saben; estas peleas entre el sector financiero por un quítame allá este que tributa o te haces pasar por no se qué. Mira que ni me va ni me viene, no es mi rollo ni es mi sector, pero cada dos por tres hay una liada por algo entre el gremio y reconozco estar enganchadísimo.



Y ojo! Aunque lo esté banalizando, creo que también debemos ser conscientes de que detrás de todo salseo hay una persona que siente. Que lo que nosotros vemos una chorrada igual a alguien le está afectando. Que lo que para nosotros es materia de comidilla de esta persona es su vida.

Y  dicho esto, voy a enlazar con el lado turbio del salseo.

Como hemos dicho, es inevitable cierta especulación o chafarderío, e incluso nosotros mismos lo fomentamos al exponernos. Cuando lanzas algo al proceloso mar de la red nunca sabes lo que te devolverá ésta. Hay que asumirlo.

Pero una cosa es cierto cotilleo y otra la difamación. Y voy a ser muy concreto; de un tiempo a esta parte parece ser que está “de moda” llamar a alguien acosador, maltratador, etc…a fin de difamarle. Y esto, amigos, es algo muy serio, no se trata de si la tiene pequeña o si maneja el látigo mejor o peor. No se puede banalizar algo tan serio sin más.

-“Es que me lo han dicho”.

-¿Quién? ¿Por qué? ¿Con qué pruebas?

Y es que difama, que algo queda. Y digo lo de acosador, maltratador, etc…pero vale para cualquier cosa turbia y deleznable.



Y aquí enlazo con el lado mierda de este asunto. Todos, y yo el primero, tenemos nuestras filias y nuestras fobias. Gentes que nos cae mejor o que nos cae peor. Somos objeto de envidias y a la vez envidiosos. Una cosa es eso.

Otra es la mala leche. El hacer daño a consciencia. El “te vas a enterar, que me dejastes”, el “le voy a joder que me quitó la novia (como si fuera tuya)”… El “este está con una tía cañón y yo me como los mocos”. El “le hace caso más a ella que a mí”, etc…El lanzar mierda sobre temas delicados una y otra vez excede y sobrepasa el salseo.

También está de moda  llamar a alguien machista/misógino/íncel porque no me cae bien, o piensa en algo distinto a lo que pienso yo, y ala! A soltarlo y quedarse tan tranquilo/a. O mandar a algún/a tonto/a útil que lo suelte y yo me quedo a resguardo.

Creo que tod@s debemos ser responsables y distinguir el salseo de la difamación y lo turbio. Y ojo, esto es válido para los que me caen bien y los que me caen mal.

Por eso, advertencia; no os creáis todo lo que se os diga o leáis. Sed críticos. Cuestionad.



Así que en base a eso voy a hacer una última advertencia; cuidado también con lo que ponéis en las redes. Yo no tengo ni puta idea, pero cualquiera que sepa manejar un móvil más allá de los ajustes puede localizar una dirección si ponéis una foto de una calle. Se de un caso de alguien a quien localizaron su dirección porque puso una foto en la que se veía el pomo de la puerta de su calle.

Y repito; la gente tiene muy mala leche.

Así que para, en concluyendo, decir eso, que el salseo nos mola, que es inevitable, que estamos expuestos. Y que la mitad habla de la otra media y la otra media de la mitad. Que nos lo tomemos  con humor, porque alguna vez seremos nosotros la salsa. Pero, sobre todo, que sepamos distinguir lo banal de lo serio y no aceptar según qué cosas.

Tengan cuidado ahí fuera.

Spirit.

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