EL CREPUSCULO ES EL MOMENTO MÁS BELLO DEL DÍA

Como estamos en verano y eso del látex, los látigos, las cadenas y demás da un poco de palo, vamos a ir entrando en temas un tanto más intrascendentes y con una perioricidad un tanto irregular, que sabido es que en estas calendas la blogsfera se dispersa un poco. No cerramos por vacaciones, pero bajaremos un poco el ritmo (o no, depende de como me chote).

Quien sí se las pira de vacaciones al Caribe a ligarse mulatas es el amigo Indocumentao, por lo que en este mes de agosto no habrá la Bedesemeniada de rigor. Así que lo mejor del blog lo perdemos este mes, cachislamar, pero bueno, el chaval también necesita un poco de descanso, ya que ha tenido mérito de sobra al no fallar ni una sóla semana desde hace casi un año. Las Bedesemeniadas vuelven en septiembre, tranquilos, a no ser que alguna de esas mulatas lo cace y el amigo Indocumentao se quede por allá vendiendo amuletos a los turistas para mantener a sus churumbeles.

Decíamos, pues eso, que a la vez vamos a ir tocando temas un tanto intrascendentes, que no apetece en estas fechas hablar de bdsm puro y duro. Hoy vamos a hacer un homenaje a las mujeres maduras.

 

Y es que quien tenga a bien seguir este blog ya sabrá  por mi predilección por este tipo de mujer. Y no me pregunten por qué, pero donde esté una mujer que sobrepase los 40 (y si es de largo, mejor), que se quite cualquier chochito desnatado de la generación de la wii y la play y el yupi yupi.

 

Así pues, en esta línea de admiración y adoración a la belleza femenina, que no deja de ser la esencia del femdom (y que no tratamos mucho por aquí), he aquí 4 ejemplos de mujeres en edad madura que les dan sopas con ondas a cualquier jovencita y ante las cuales nos quitamos el sobrero.

 

UNA RUBIA: MARG HEGEMBERGER

 

A mí me da el morbo añadido de que trabaja con sangre, cadáveres, vísceras, autopsias, etc...Nuestra forense favorita del CSI LAS VEGAS es esta rubia de porte y clase que igual te analiza un tiroteo que te disecciona un hueso. Como punto a mejorar, esa tendencia a la falta de carne en sus idems, me temo que mal endémico de estos tiempos que nos han tocado vivir. Pero no me digan que no es un bellezón y la esencia del morbo. En la serie hace de madre soltera con una vida sexual más bien vacía, cachislamar, que bien se podría potenciar una afición un tanto insana del tipo “me mola atar a los hombres con los que me acuesto y hacerles el amor mientras parecen muertos”. Cosecha del 58, cabe añadir, por lo que es una pimpolla de 53 primaveras, ignoro ya cuántas al frente de la serie.

UNA PELIRROJA: JULIANNE MOORE.

 

Ya saben lo que dicen de las pelirrojas; que son puro fuego. He de confesar que lo ignoro, por que entre mis conquistas nunca ha habido una que lo fuera, al menos de forma natural. También dicen que son brujas, reminiscencia de otros tiempos, y, citando a Quevedo; “ni gato ni perro de aquel color”. En este caso, creo que se explica por la ascendencia irlandesa de la amiga Julianne, cosecha del 60, ya que por esos fueros de los bárbaros del Norte es más habitual. A mí no me gustan especialmente las pelirrojas, lo que me gusta especialmente son las mujeres como Julianne Moore. Qué clase, qué belleza, qué saber estar. Una de esas actrices que no paran de trabajar y que tienen una filmografía más que interesante, capaz de hacer cualquier cosa independiente de esas de prestigio y mensaje y luego meterse en un trhiller convencional. Y encima, ésta sí, algo más por donde agarrar tiene.

 

UNA CASTAÑA: SIGOURNEY WEAVER.

 

Pues hablamos de ella la semana pasada y aquí no la podemos dejar escapar. Nada que decir que no lo hiciéramos en el post de más abajo o en los propios comentarios, salvo que esta mujer pasará a la historia por plantarle cara y hostias a los bichejos esos de las pelis de Aliens, con su look militar y su porte agresiva de “conmigo no hay quien pueda”. Y ya lo creo que no. Personalmente, si no la hubiera visto igual de bella y morbosa en otras películas donde hace de detective, primera dama, estudiosa de gorilas o novieta con mala leche, le escribiría un e-mail sugiriéndole que yo me disfrafaba de Alien y ella me daba hostias con sus botarras. Pero al verla en todo lo comentado pues no hace falta que me disfrace de nada ni que me pegue caña...con estar a su lado me conformo.

UNA MORENA: DEMI MOORE.

 

He de confesar que no es especialmente santo de mi devoción, pero es que no caigo en otra morena crepuscular que me haga tilín. Tiene menos clase que las anteriores, pero tampoco desentona en esta lista, ya que la amiga Demi con sus 50 primaveras sigue ahí, en el candelabro, llenando ríos de tinta en los tabloides con sus relaciones, normalmente con chicos más jóvenes que ella (y bien que hace!), con sus declaraciones, sus leyendas míticas (que si antes de actriz fue mujer de 50 y la cama, si es ambiciosa y fría y le gusta más la pasta que a un tonto un lápiz, etc..) y con esos ojazos verdes que tiene encima de esas dos tetas que pudimos ver en aquel truño infumable de STREATEASE. A mí, esto de que sea fría y cruel me da morbo...

 

Pues eso es todo por hoy. La próxima vez algo mejor...o no. No olviden ver las  estrellas.