ME PERMITEN UNAS PALABRAS?

¿Hay alguien ahí?

Supongo que no. No les culpo. Ni yo mismo he estado. Y cuando he dicho que iba a estar, no he cumplido. Tengo pendientes respuestas de amigos que me han escrito en privado. Soy un impresentable, lo siento. Pero os quiero y os responderé.

Así que no me voy a marcar otro tocho diciendo que volveré y patatín. No lo sé. No creo que lo haga. O sí. O no. O tal vez.

Es que me resisto a dejar morir este espacio. Durante 5 años fue la niña de mis ojos, al menos toda la niña de mis ojos que puede ser un blog. Me divertí, me preocupé, me lo curré. Descubrí con ello amigos contertulios, otros blogs, amigos en real, incluso cosas/ sucesos/sensaciones/amantes que sólo se podrán extraer de mi cerebro muerto.

Tuve alguna batalla. Pocas, la verdad, pero he de reconocer que molaron y me quedé con ganas de batallar más.

Tuve, en la mayoría de las ocasiones, la satisfacción del orgullo del artesano cuando subía un tocho que creía me había quedado medianamente decente. Incluso alguno que creo que me quedó de puta madre. Otros, claro, fueron un tostón mediocre. Que cada uno decida a qué grupo corresponde qué.

Conocí al amigo Indoc, otro desaparecido, y juntos hicimos una pequeña obrita de humor que tiene su aquel. Aún hoy en día circula por ahí.

Siempre me sorprendió que un blog tan poco visual, escrito por un hombre, (encima sumiso), que se marcaba tochos como ladrillos tuviera tantas visitas. Pensaba que en esta era de los titulares y los 140 caracteres y el megusta de Facebook no había nadie que se parara a leer, la verdad.

También yo descubrí otros blogs, muchos de leer también. Y, como he dicho, otras gentes, otros contertulios, etc…

He de reconocer que me asalta un puntito de prepotencia cuando pienso que desde este bastión se ha contribuido a normalizar en cierta forma el bdsm. Quiero decir…es imposible saber a cuánta gente le ha sido útil este espacio para ver el bdsm como algo cotidiano, humano, normal, desmitificado. Incluso como algo con humor de personas normales que sienten un deseo un poco raro. Quizás el 0.000000002% del 0.00000002% de los que han visto el tráiler de LOS MUNDOS DE GREY, pero aunque fuera una sóla persona ya valió la pena.Y me consta que ha sido alguna más.

Y esa es otra. Cuando inicié este blog LOS MUNDOS DE GREY no era ni un borrador de fan act en la mente de la señora esa que los ha escrito. Ahora puede que en cierta forma se vea el bdsm más normal, o cuanto menos más conocido, gracias a las aventuras y desventuras sexuales del rico guapo y la tonta guapa. Pero siempre lo he dicho; en mi adolescencia me sentía raro, no sabía nada de este tema ni podía acceder a él. Y no quería que a nadie le pasase más esto.

Bueno, pues todo esto y un día…zas! Perdí el interés por el blog.

No fue exactamente así, pero tampoco exactamente lo contrario. Y tampoco puedo explicar exactamente por qué.

No porque me dejase de interesar el bdsm. Es mi adn, es mi sexualidad, es algo que forma parte de mí, como los tebeos, el alcohol o tener tendencia a engordar. ¿Sabéis aquello de que no se erradican los vicios, que sólo hay largas pausas entre recaídas? Pues aquí ni eso. Pausa del blog, sí, pero del vicio y el sentir ni hablar. Que una cosa es una cosa y otra cosa es otra cosa.

Quizás el propósito inicial ya se había cumplido. El bdsm es hoy en día algo cotidiano y nada desconocido, (aunque sin exagerar, pero ya me entienden). ¿Para qué un blog cuando hasta marujas con niños entradas en los 40 conocen ya el bdsm? ¿Qué comedura de olla va a tener alguien sobre practicar libremente la sexualidad cuando salen gays a todas horas en la tele hablando de sexo en grupo, señoras explicando el sabor del semen de su amante o pre púberes en minifalda hablando de que sienten hormigueos por el cuerpo en las series Disney?

Quizás simplemente ya había dicho todo lo que tenía que decir, que 5 años hablando de mis pajas mentales está  ya bien. Quizás la vida cambió un poco y no tenía tanto tiempo para el blog como antes. Quizás me hago más viejo y se acentúan los defectos, como la pereza. Quizás me echó un poco el freno aquella nota de blogger que olía a censura retrógrada sobre que eliminarían blogs de sexo o no se qué.. Quizás hay que dejar paso a las nuevas generaciones, que hablan por twitter y emoticonos. Pero coño, hablan, y son nuevas, y no viejos babosos como yo a los que ya no se le levanta.

En estas estaba, dejando este espacio abandonado, lleno de hierbajos, descuidado y sucio. Estaba por darle al botón de borrar y que permaneciera en la memoria de los que un día lo visitaron, de quien un día lo escribió.

Pero en el último instante me he dicho….ni de coña.

¿Y quién va a cuestionar a las profesionales que engañan? ¿Y quién le va a llevar la contraria a Ama S? ¿Y quién va a hacer chistes malos sobre rubias de metro ochenta con botas altas? ¿Y quién va a reconocer que se masturba con  las entrevistas de Ana Pastor? ¿Por qué dar paso a las nuevas generaciones cuando la che Guevara actual es una mujer jubilada de 71 años, que además es alcaldesa de Madrid? ¿Quién se va a burlar del postureo, las formas como algo sagrado, el bdsm como Santo Grial?

Es una responsabilidad muy grande, pero alguien tiene que hacerlo.

Así que nada, de vez en cuando me pasaré por aquí. No sé cuándo ni cómo ni de qué hablaré. Puedo tardar otros mil meses o puedo escribir mañana. Pero aquí estoy. No os fiéis, puede que vuelva a fallar. Puede que no os importe. Y yastá.

¿Tanto rollo para esto? ¿Y a quién le importa el tocho que me he marcado? Ya sabéis; el gato es mío y me lo follo cuando quiero.

Tengan cuidado ahí fuera.