domingo, 5 de mayo de 2024

DIVAGANDO SOBRE LO KINK, LA NUEVA LETRA DEL BDSM.

Advertencia; Princess Paula prometió un hilo en twitter sobre el mismo tema.  Seguro que ella aporta datos contrastados, hechos objetivos, historia veraz, semántica y terminología correcta y esas cosas.  Yo aporto chascarrillos, tetas y mi habitual método científico de "a bultillo". 

Pero vamos a divagar;

Antes, todo esto era sado maso, que diría la misma Paula. Esto es una silla, esto es una mesa, esto un@ Am@, esto un@ sumis@, y teniendo como referentes al Marqués de Sade, al tontolhaba de Masoch y, quizás, cierta estética de la cultura gay leather con su componente de agresividad, esto consistía en desollar viv@ a la parte s, fundamentalmente a base de latigazos. Si salían viv@s, como mucho que se ducharan y se fueran para casa sin molestar.



Creo que el punto de inflexión donde se vió que esto era un poco más complejo fue la publicación de HISTORIA DE O, de la intelectual y escritora francesa Pauline Reage, allá por la mitad de los años 50, pero llegada a España en 1977 y popularizada por la nefasta película del mismo nombre. Allí aparecen, al menos de forma más o menos explícita, conceptos como la pertenencia, la entrega, etc...Al final esto del sado maso tiene algún motivo más e incluso hay cierta belleza en ello.



Con esta tendencia y la evolución de las especies, más o menos por el inicio de los 90, vemos que esto de sado maso no es suficiente. Así que se populiza el acrónimo bdsm, que dice que esto es BONDAGE, DOMINACION, SADISMO, SUMISIÓN, MASOQUISMO, y se hace bajo las siglas SCC (SANO/SENSATO, SEGURO, CONSENSUADO). Se amplia el espectro. 

Con la aparición de internet y los mundos de Grey se populariza en cierta forma esto que antes era asociado a los true crimenes y vemos que se nos vuelve a quedar corto. Qué donde está la F de fetichismo, que dónde está la P de PISS. Que yo sólo quiero la B de bondage, que lo mío es el shibari y los nuditos en general, me la pela el resto. Que tal, que cual. 

Así que bien entrada la primera década de los dosmiles o por ahí se empieza a emplear el término "kink" para referirse a cierta sexualidad alternativa. Y claro, como nosotros somos los campeones de la sexualidad alternativa, enseguida añadimos la k y nos empezamos a llamar BDSMK. 



Hasta aquí más o menos la historia. Bien, pero...¿qué es exactamente el BDSMK?

Pues como todo término reciente, todavía queda por definirlo exactamente. Hasta que no venga Don Arturo Pérez-Reverte o algún otro miembro o miembra de la Academia no está del todo claro. Yo he leído diferentes versiones, voy a intentar resumirlas en un poti poti personal.

En principio, sería el bdsm de "baja intensidad". El juego sin más por el placer de jugar, donde no son necesarios los roles definidos. Un poco el condimento del polvo, el pañuelo en los ojos mientras me metos el dedo por el culo, el atrezzo molón. Todo lo que no sea mete y saca. E, incluso puede haber roles, pero D/s la justa, prácticas de riesgo 0, aquí vamos a hacer cerdadas pero en plan buen rollo. 

Que no necesitas ser mi Amo/a para atarme, que no necesito azotes para que me mole el shibari, que me puedes besar mientras practicamos sexo duro y me tiras del pelo, que luego me toca a mí ponerte el strap on y ponerte el culo en la cara. Los juguetes que forman parte del ajuar o para no fallar en una primera cita. Que no importan los roles ni los protocolos ni las normas, sino el pasarlo bien. No sé si me explico. 



Esta definición de andar por casa, por supuesto, tiene más agujeros que un queso de gruyere y es para entendernos. Para empezar; ¿qué es bdsm de "baja intensidad"? Para los de LA COVA todo lo que sea sin ganchos, sangre y amputaciones, pero igual a fulan@ le ponen una venda en los ojos y ya le entran sudores. 

Por eso algunos doctores de esta Iglesia hacen hincapié en que no haya roles definidos o verticalidad profunda. Pero claro, para una sesión de shibari no necesitas tampoco nada de eso y es la B del bdsm, o a un masoquista que disfruta siendo desollado vivo díle que se vista de sissy y te limpie la casa por la verticalidad. 

La cosa es que con esto ha entrado un montón de gente, mayoritariamente joven, libre de tabués y prejuicios, para los que el bdsmk es lo más natural del mundo. Y a mí me parece estupendo. Y con ello voy a lanzar un par de reflexiones, que como siempre se pueden resumir en tres. 

REFLEXIÓN NÚMERO UNO: Hace años, antes del término BDSMK, vino a una quedada del grupo de fracasados y zarrapastrosos del chat ozú la prima lejana de una de las integrantes o algo así. Una chica vainilla totalmente, que no sabía lo que significaba bdsm siquiera. Pensábamos que iba a salir espantada, pero hablando de todo un poco empezó a decir "es que muchas de las cosas de las que estáis hablando las he hecho yo con mis parejas sin ponerle nombre, como por ejemplo mearnos en la ducha juntos y esas cosas".



Claro, a los más puristas del lugar se le pusieron los pelos como escarpias. "Cómo vas a comparar una meada en la ducha como juego sexual a una lluvia dorada como Dios manda, por favor". Pues si, es exactamente lo mismo, aunque la intención sea diferente. 

Y es que el bdsmk es la institunalización de los juegos sexuales de toda la vida (bueno, de toda la vida no, pero ya nos entendemos) y que nos hemos apropiado nosotros. 

REFLEXIÓN NÚMERO DOS: A mí esta entrada de gente joven sin prejuicios me parece maravillosa. Ya lo he dicho muchas veces. Un soplo de aire fresco necesario. Y siempre pongo el mismo ejemplo; cuando yo era joven, podía enrollarme (con esfuerzo, pero poder podía) con una chica en una discoteca. Pero si a esa misma chica le pedía lamerle el pie, por ejemplo (no te digo ya nada de una lluvia), al día siguiente era el hazmerreir del insti, el pervertido de la clase, el raro y creepy de los gustos raros.

Ahora cogamos la máquina del tiempo y mi yo de hace, ejem, ejem, 35 años vuelve al instituto. 

-Ey, sabes que Spirit es un tipo raro, pervertido y que oculta algo? Ayer me enrollé con él y se limitó a comerme la boca, no me pidió que le metiera nada ni que le atase, ni siquiera quiso venir conmigo al lavabo a lamer mi pis, yo creo que ese no es de fiar...



REFLEXIÓN NÚMERO TRES. Hay quien dice que la entrada masiva de este colectivo ha "devaluado el bdsm". En cierta forma, no deja de ser una ley económica; cuando una cosa escasea, tiene valor. Cuando circula de forma abundante, lo pierde. 

Ya sabéis mi postura; yo prefiero comer pollo tres veces al día que no comerlo. Pero es que, además, siempre habrá una selección entre afines; habrá quien se quede en el polvo condimentado, habrá quien tenga sensaciones más allá, habrá quien quiera probar y juegue más fuerte, habrá quien tenga D/s profunda, etc..

Por supuesto, por si fuera necesario lo remarco; nada es mejor o peor, mientras sea válido para las partes que lo practican. 

REFLEXION NÚMERO CUATRO: Siempre he pensado que por practicar bdsm no se es superior ni similar, simplemente tenemos otros gustos. Pero sí que se es en cierta forma más evolucionado, en el sentido de que utilizamos nuestra capacidad para pensar, crear, jugar, y con ello sentir sensaciones más allá del instinto primario y la función que se supone nos ha de guiar. Los animales no practican bdsm, por ejemplo.



Así que con esta reflexión se me ha ocurrido una analogía con la que cierro el tema; para mí lo kink es a la sexualidad lo que es la gastronomía a la comida; la evolución de una función primaria. Es decir; para mantenernos vivos basta con comer. Pero como tenemos la capacidad de crear, creamos la gastronomía, con sabores, sensaciones, etc...Para reproducirnos basta con follar. Pero vamos más allá, y jugamos en libertad con nuestros deseos y sensaciones. 

Tengan cuidado ahí fuera.

Spirit. 


1 comentario:

Nikki dijo...

Kinki es Nikki escrito de otra manera... 😅
Muy buenas reflexiones.
Besotes! 😘