PLACER CULPABLE: ALICIA SÁNCHEZ-CAMACHO

Pues qué quieren que les diga, a mí esta tía me pone. Cada uno es como es, y yo soy así. Me vendrá alguien diciendo que soy un cafre, hablando de la sexualidad, aunque sea morbosa, de una servidora pública, como el alcalde aquel que dijo que le gustaban los morritos de la Pajín y se armó la marimorena. Pues oye, aparte de que aprendí ética con Rodríguez- Menéndez, la verdad es que yo no represento a ningún cargo institucional, hablo desde esta trinchera y si una mujer que se dedida a la política me pone, pues lo digo y me quedo tan ancho. Y no, no la pienso valorar por sus méritos por que nadie que se dedique a la política tiene mérito alguno. Así que ya que todos son unos gualtrapas al menos que nos alegren la vista. Personalmente, no me pienso escandalizar si alguna fémina dice que le pone Rajoy, por ejemplo, aparte de escandalizarme por el mal gusto que tiene.

Pero volviendo a Alicia Sánchez-Camacho, que para quien no lo sepa diremos que es la presidenta del Partido Popular en Cataluña, he de decir que me pone y aún no sé exactamente por qué. Quizás sea por esa imagen de señorona a la que se asocia a las mujeres de derechas, en contraposición a esas tipas de la izquierda que no se lavan y van por ahí fumando porros en plan hippye, a ver qué rollo fetichista-dominante tiene eso. Bueno, claro, estoy hablando de imágenes de hace tiempo, que ahora las mujeres de izquierda visten de armani y posan en el Vogue. Pero estoy divagando...

Pues no sé por qué me pone esta mujer. No es que sea fea, pero una cara agradable tampoco la tiene, hay que reconocerlo. No tiene una actitud autoritaria, que eso puede dar cierto morbo, por que sabido es que el PP es un partido de centro y dialogante (ejem, ejem), y claro, la pobre Alicia ha de ir por ahí sonriendo y dando besitos a los niños.

Creo que lo que más me gusta de ella es ese aspecto de ocultar algo. Intuyes que bajo esa sonrisa se encuentra una mujer de armas tomar y que te debe dejar tieso a palos como tenga un día ganas de marcha. Que bajo su vestido de chaqueta oculta un strapon que te lo mete y te quedas sin habla. Quizás sea esa energía que emana. Quizás es que es un poco follonera y eso siempre tiene un plus. Quizás es que si, a veces va de dura, aunque no se atreve del todo a meterla sin baselina, pero lanza algún tirito contra los inmigrantes aquí y otro tirito contra el independentismo allá y ves que le va el tema duro. Quizás sea, como he dicho, esa imagen de señorona, aunque es madre soltera y dice que le cuesta llegar a fin de mes (ejem, ejem). No lo sé. Pero oye, a mí me pone y me encantaría darle un látigo y ser abducido ideológicamente por ella. Aunque va en contra de mis principios, estoy dispuesto incluso a votar al PP si es necesario.

No sé si le va el tema o no. Intuyo que, si le va, ha de dar una imagen y eso y, siendo de derechas, lo llevará en el más absoluto de los secretos. Que sepa que puede contar conmigo. Soy una persona discreta y sólo lo publicaré en el blog.