sábado, 22 de octubre de 2011

DE LAMER EL COÑO, CILICIOS Y OTRAS CONFESIONES

Sin contar la bedesemeniada, este es el primer escrito de la nueva temporada porque, ya sabes, iniciamos el cuarto año de este espacio y a ver dónde nos lleva. Si esto en vez de un blog fuera el primer episodio de una serie, o el retbot de DC cómis (esta referencia sólo la entenderán cuatro frikis) habría que hacer algo espectacular. Algo que acabase con una sorpresa final que os va a dejar enganchados de por vida y cosas así. Pero cómo es el mismo espacio de siempre y no deja de ser un puto blog, vamos a contar lo que nos chota. Y lo que me chota hoy es un batiburrillo de pensamientos a los que intentaré dar una conexión para que no quede la cosa muy chunga.

Para empezar, haré una confesión aprovechando que tengo el día tonto. Yo digo que soy un sumiso masoquista y tal, que me gusta transformarme en zorra y que hagan conmigo lo que quieran, mientras más fuerte, más sucio y más bestia mejor, atado e indefenso a merced del otro. Y es cierto. Pero lo que en verdad me gusta...es comerme un coño.

No me entendáis mal; me gusta todo eso que he dicho y que son las prácticas de éste juego que me vuelven loco. Pero yo creo que el lamer el sexo de la Ama es una de las mejores prácticas y una de las que más me llena.

Vaya, Spirit, vas de sumiso divino de la muerte y luego eres un vulgar lamecoños. Hace poco dijistes que lo que en verdad te gustaba era besar y ahora vas y confiesas que además te encanta lamer un coño, vaya vainilla estás hecho. Para eso no te crees un blog de bdsm, chaval. Aquí hablamos de dolor, pertenencias, etc...no de ésas cosas.

Y ahora contraataco con argumentos. Para mí el lamer el sexo de una mujer es una de las prácticas más bedesemeneras que conozco. Simboliza la entrega absoluta. Priorizas el placer de la mujer, del Ama en este caso. Te entregas para que disfrute, bajo sus muslos, sin esperar nada más a cambio que ella gima de placer y sienta tu lengua a su entero servicio. Tu disposición más que otra cosa.

Imagina que tienes a una Diosa de ira terrible que igual puede ser leona que gata. Y ella te deja acceder a su sexo y penetrar en su ser. Con la lengua, como un mero esclavo a su servicio, y la quieres satisfacer porque esa Diosa es mitad divina, pero también te ha mostrado su lado humano y la entrega es total.¿Esto no es bdsm?

Y ahora voy a hacer otra confesión, no sé si al hilo de la anterior. Soy un ateo de mierda. Bueno, más que un ateo soy un gnóstico, que viene a decir que no puedo ni negar ni afirmar la existencia de Dios, y por ello no hago que gire entorno a Él mi vida. Pero me fascinan la imaginería religiosa. Las técnicas de mortificación y disciplina que tienen me ponen un poco a cien, la verdad, y más de una noche de insomnio la he pasado imaginando escenas en sótanos de conventos y demás. Hay un aparato que me tiene fascinado, y es el cilicio. Para quien no lo conozca, diré que es ese aparato que se ha popularizado a raiz de la novela EL CÓDIGO DA VINCI, una red de hierro que se pone prieta en la carne y causa un dolor constante.

Es una lástima que en el catolicismo no haya Diosas, si no santas, vírgenes y cosas así, porque imagino que un aparato de ésos en manos de la Diosa de la furia y el poder, y que ésta te lo apriete bien fuerte, y te tenga así un buen rato. ¿Puedo ir a un convento a pedirlo, y si se presta alguna monja de buen mejor?

Bueno, pues para éstas confesiones, la verdad, tampoco hacían falta muchas alforjas. ¿Y ya está?

Pues no. Confieso que he pecado. Confieso que he vivido. Confieso que tengo magia y fill y buen rollo. Confieso que soy un poco puta. Confieso que digo que lo importante son las personas pero me acerco para besarlas mientras me tomo una cerveza. Confieso que soy un egoísta y un cabrón. Confieso que me gustan las mujeres que visten de negro crepuscular. Confieso que me cabe por el ano más parte de una mano de la que pensaba. Confieso que cuando me ponen las esposas tengo miedo a que se pierda la llave. Confieso que me callo cosas porque soy un cobarde. Confieso que tengo una gran pena. Confieso que tengo una gran alegría. Confieso que me pueden las Diosas capaces de combinar dolor y ternura. Confieso que soy una puta mierda de sumiso, pero que si entras en el juego te puedes llevar que me entrego más allá de mi sonrisa capulla. Confieso que me gustan tus ojos de leona, pero sobre todo tu sonrisa de gata. Confieso que las mejores sesiones son las que acaban con la sensación de que sólo ha sido un preludio. Confieso que los entendidos sabrán entender lo que yo entiendo.

Confieso que es un post un tato “raro”. La semana que viene volveremos a la senda habitual, debatiendo quizás sobre ese bdsm humano que echaba en falta el contertulio Alberto en los comentarios. Hasta entonces, ya saben, el miércoles es el mejor día de la semana porque toca BEDESEMENIADA y tengan cuidado ahí fuera y sean buenos o malos en su justa medida.

13 comentarios:

JEFA_Mad dijo...

Muchas otras veces me ha gustado mucho tu lectura, pero esta última entrada.... más que nunca!!!!

lucas dijo...

Tienes toda la razón. Comer el coño de una mujer, que nos domina, que en ese momento es nuestra diosa, es algo increíble. Me produce un gran placer porque mientras me encuentro ahí lamiendo siento que estoy al servicio de esa mujer a la que deseo hacerla gozar más de lo que yo mismo pueda conseguir. En ese momento pienso que es el placer de ella lo primero, porque mi placer se alimenta del suyo.
Y enhorabuena por tu blog. Me he enganchado a él y lo voy siguiendo. Es difícil mantener un blog y más si es de bdsm.

Ama S. dijo...

Esto me recuerda a cuando me preguntan mis aspirantes a sumiso "¿qué le gusta hacer a sus sumisos?" Y la clave es "qué me gusta que me hagan a mí"... y ahí lo has clavao, spirit, el sexo oral es lo más de la entrega sumisil para mí; puede ser parecido a la misma práctica vainilla, pero no idéntico.

Spirit dijo...

Saludos a todos;

JEFA_Mad; pues me alegro que te haya gustado esta entrada...yo creo que es de las raras pero a la vez de las más clarificadoras...no sé si me explico.

Un abrazo

lucas; no recuerdo si te has pasado antes por aquí, en todo caso te doy la tradicional bienvenida y te digo que esta es tu casa para lo que quieras.

Explicas de forma extraordinaria lo que he querido transmitir; que comer un coño es a la vez comer un coño y mucho más, una sensación de entrega absoluta...

Un abrazo

Ama S; yo creo que la diferencia entre hacerlo una práctida vainilla y una práctica bdsm es la mentalidad; el sumiso que la hace con los condicionantes bdsm en mente se entrega más allá....

Por cierto; te digo lo que al amigo lucas, qeu no recuerdo haberte dado la bienvenida anteriormente, así que de no haberlo hecho antes, lo hago ahora y digo desde ya que esta es tu casa para lo que quieras.

Un abrazo

Spirit dijo...

Por cierto, Ama S; he visto tu espacio y me he detenido en el mismo. He hecho un comentario de ná, un folio y pico, en defensa del gremio sumisil...pero no hay forma de que me lo deje poner, ignoro por qué detalle técnico. Si te interesa, díme la forma de hacértelo llegar...

Un saludo

Reina Lilith dijo...

Me gusta, mucho, tu blog. Lo paso realmente muy bien con las bedesemiadas (que confieso comparto con los cercanos a mi) Pero este último blog ha despertado en mi una mezcla de nostalgia con ternura.... Nostalgia porque eres muy parecido según tus comentarios al sumiso que tuve que despedir hace poco... Que cuando terminábamos las sesiones me arropaba, comprobaba que mis perritos tuvieran agua, me besaba la frente y me dejaba dormida (y muy satisfecha) en la cama.... Ternura porque es completamente lo que me pone....

Felicidades por tu blog y gracias por compartirlo

Spirit dijo...

Saludos a todos;

Reina Lilith; me alegro que te gusten las bedesemeniadas y las hagas circular ;-) Así mismo, lamento la nostalgia que transmites, seguro que era un buen sumiso y tierno...algo que he de confesar yo no soy, ni buen sumiso ni tierno, lo que pasa es que a veces me da la vena tonta...

Un abrazo

Àngel dijo...

Hablando de otra cosa y de lo mismo.

¿Alguien sabe donde venden cilicios, disciplinas y toda esta parafernalia ejem...religiosa?

Si sabeis de algun sitio en Barcelona, ya seria la hostia.

Ama S. dijo...

spirit, ya puedes dejar tu "ladrillo" cuando quieras en mi blog ;)

Vecino dijo...

Besar, lamer coños ... de labios va la cosa ¿No?
Si besas como cuando lames un coño y lames un coño como caundo besas ... ¿No es lo mismo?

Anónimo dijo...

Como dice el refrán, la intención es lo que cuenta. La mentalidad, como tú bien dices aquí, es lo que transforma una práctica vainilla en una bedesemera. La mentalidad del que lame y la de la que aprieta los muslos en torno a esa cabeza que sabe suya, para su disfrute.

Y es que, a veces parece que las prácticas estas son muy rebuscadas o muy acrobáticas o muy preparadas, como una especie de escena teatral en la que cuidamos la estética, la luz, el encuadre y todo eso y no siempre es así. Sin tanto atrezzo ahí lo teneis: un cunnilingus que es mucho más de lo que parece a simple vista.

Por cierto Spirit, ¿sabías que hay una leyenda urbana que dice que la mayoría de conventos, iglesias y demás edificios utilizados por religiosos estaban conectados por secretos túneles varios metros por debajo del asfalto con el fin de facilitar encuentros ejem secretos y pecaminosos? Esas fantasías, quizás no la que aquí describes aunque también, son creo bastante recurrentes. ¿Quién, entre las féminas, no ha imaginado alguna vez el oscuro placer que sería pervertir a un curita inocente y confundirlo, mostrándole las maravillas de un infierno terrenal al que se viera atraído sin remedio? Por algo las mujeres somos el pecado hecho carrrrne. Aparta de mí ese cáliz, Amén. Cuánto daño hizo Él Pájaro Espino, por Dios.Juas!

Besos!!!!

Seda.

Tesa dijo...

Bueno, Spirit, lo que más me gusta del post es esa confesión final del penúltimo párrafo.
Me enternece.
Sí, hijo, yo soy también una mierda de Ama ¿qué quieres que te diga? ...que más que darte un par de ostias por blandurrio, te daría un beso en la frente.

Spirit dijo...

Saludos a todos;

Angel; pues yo estoy por pasarme por algún convento y sondear, como quien no quiere la cosa...De todas formas, si te pones en contacto conmigo por e-mail te puedo decir de algunos conocidos que saben dónde conseguirlos, los muy viciosos...

Un abrazo

Ama S; pues presto voy a dejarlo. De todas formas, igual no es problema de tu blog, que he visto que a veces en según qué configuraciones no me deja dejar comentario como "cuenta de google" si no como anónimo (eso sí, yo siempre firmo). Si no lo ves en un rato, es porque persiste el problema o porque no encuentro el escrito original...

Un abrazo

Vecino; efectivamente; de besos y labios va la cosa, además de lengua, jugos, fluidos, y, sobre todo y ante todo...placeres carnales (y mentales) varios.

Un abrazo

Seda; pues efectivamente, la intención es lo que cuenta, y en este caso no sólo cuenta si no que deviene la diferencia entre una práctica y otra...Todo es cuestión de la mente, que es el mayor órgano sexual que tenemos y que el muy jodío es capaz de transformarlo todo.

Y bueno, de leyenda urbana nada...anda que no son viciosos los curas, las monjas y demás fauna...es que tanto tiempo encerrado y sin los placeres mundanos, ni tebeos ni nada, levantándose a las tantas para cantar el oremus y tal y vamos...yo un par de días así y me vuelvo un pervertido de tomo y lomo.

Un abrazo

Tesa; como siempre...este rosario de cuentas infelices/ calla más de lo que dice/ pero dice la verdad...sí, soy una mierda de sumiso, (y yo creo que Vos de mierda de Ama no tenéis nada, porque lo importante es saber lo que se quiere), decía, que soy una mierda de sumiso, pero si ello me hace ganarme un beso en la frente vuestro...un momento...¿en la frente? ¿Es que no te has leído los post????

Un abrazo